
El vocero presidencial y candidato a legislador por La Libertad Avanza, Manuel Adorni, anunció este martes una serie de medidas destinadas a facilitar el acceso a productos electrónicos importados y promover una mayor competencia en el mercado.
Entre los puntos más destacados, el Gobierno reducirá los aranceles para la importación de teléfonos celulares del 16% al 8% en una primera etapa, y los eliminará por completo a partir de enero de 2026. Además, se aplicará una baja en los impuestos que gravan la importación de televisores, aires acondicionados y consolas de videojuegos.
Adorni explicó que la iniciativa busca “mejorar el acceso de los argentinos a la tecnología y reducir los precios al consumidor final”, en línea con las políticas de apertura económica y desregulación que impulsa la actual gestión.
La decisión generó reacciones mixtas. Mientras que desde sectores vinculados al comercio celebraron la medida por su potencial para dinamizar el mercado y abaratar costos, representantes de la industria nacional, especialmente en Tierra del Fuego, manifestaron preocupación por el posible impacto en la producción local y el empleo.
La medida comenzará a implementarse en las próximas semanas, y se espera que tenga repercusiones tanto en los precios como en la estructura del mercado tecnológico argentino.