El sábado después del acto protocolar, el show artístico estuvo a cargo de Saúl Huenchul quien en un momento invitó al “Duo Los Jubis”, conformado por Néstor Haro y Adán Salazar. “Esta hermosa oportunidad se dio por esas cosas lindas que tiene la música. Nos sentimos muy agradecidos de haber compartido con Don Huenchul, no solo el escenario sino también de un hermoso momento a la noche cantándole sus canciones, que orgullosamente aprendí y memoricé de chico”, contó Néstor.
¿Cómo conformaron el dúo?” Con mi compañero Adán nos encontramos así, en un encuentro en la Estancia la Ascensión, yo anteriormente trabajaba en la policía y me jubilé junto a un amigo Jorge Avilez y siempre defendimos lo que es la música de acordeón y guitarra, lo que hacían antes nuestros viejos, nuestros familiares. Yo me crié en el campo muy humilde y yo veía como mi padre con sus amigos tocaban acordeón, guitarra, comían asado y eso era lo lindo… la gente se encontraba de estancia en estancia y siempre había una guitarra o una acordeón viejo. Ellos tocaban música y ahí se me fue pegando y tuve la suerte, gracias a Dios, de haber aprendido algo ya que nunca estudie música” y agregó: “Como comentaba en la Estancia la Ascensión una vez invitado con Avilez a un encuentro que se hizo en el galpón, llegó este hombre Adán Salazar y ahí vi como él tocaba y toca muy bien el acordeón, sabe todos los géneros. Y desde ese momento charlando y con la música que hace amigos, hace amistades arrancamos con juntos”.
Para finalizar dejó un mensaje “Es lindo que los pueblos defiendan sus costumbres, raíces y creo que eso se va perdiendo, nos invade el ruido moderno que no viene a nuestras raíces pero respeto todo”.Néstor Haro, que solo se define cómo alguien que tiene la suerte de sacarle notas y melodías a un instrumento, se despidió con una bonita glosa, autoría de su padre:”Yo no soy cantor señores, soy solo un aficionado, que hace muy poco a empezado, y en este pago a cantar tampoco me hago rogar si piden que cante, canto.Y señores por lo tanto, aunque cantar no se nada, Con mi guitarra templada canto para pasar el rato”.