En instalaciones del Gimnasio Municipal Luis “Lucho” Fernández comenzó esta tarde una clínica de handball liderada por el reconocido entrenador Rodolfo “Pucho” Jung, que se desempeña en la Selección Argentina en la categoría menores.
Se trata de una actividad que mañana continuará en el Gimnasio Juan Bautista Rocha y de la que participan jóvenes de diferentes entidades deportivas de nuestro medio.
En tal sentido, Sergio Vilche, director general de Deportes y Actividad Física de la Municipalidad de Río Gallegos, destacó el trabajo de Jung y comentó: “Se trata de una capacitación y captación de valores en la categoría juveniles”.
Vilche acotó que esta formación de alguna manera es la continuidad del trabajo que se viene realizando desde la comuna, ya que “si bien trabajamos mucho con la Liga Municipal de Handball después también trajimos a los profesores para dar una clínica (con Dady Gallardo) y en esta oportunidad colaboramos con la Asociación de Handball también brindándole el espacio para que puedan llevar a cabo esto, que está muy bueno porque a los chicos les sirve mucho, por la intensidad con la que se trabaja”, rescató.
Por su parte, Humberto Navarro, de la Asociación Amigos del Rocha (ASOAR) destacó que Rodolfo ‘Pucho’ Jung es técnico de la Selección Argentina en junior, y cuenta con una destacada trayectoria a nivel europeo. “Traerlo a él tiene que ver con la idea de que nuestros chicos sigan creciendo. Si bien en estos tiempos la actividad se abrió un poco más, la idea es que el handball vuelva a crecer porque estuvimos mucho tiempo encerrados”, planteó.
Navarro recordó que “hace un tiempo atrás vino Dady (entrenador de la selección femenina de handball), ahora es el turno de ‘Pucho’; entonces, la intención es seguir capacitando y aprender, a la vez que también hay una detección de talentos, y en ese sentido ver futuros jugadores que, de acuerdo a la edad, puedan ser parte de lo que se viene después del mundial de 2023”, dijo.
Mañana la actividad se traslada al Gimnasio Juan Bautista Rocha en el horario de 10 a 13 horas. “Antes estuvimos en El Calafate, con gente también de El Chaltén, y después en la Cuenca Carbonífera. Apostamos a que los chicos sigan creciendo y ver si alguno de ellos puede quedar citado”, concluyó.